Instrumentos cuyo sonido se produce por la vibración del aire dentro del tubo.
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| Clarinete |
En los instrumentos de viento madera, el sonido es producido por la vibración del aire dentro del tubo, cuya longitud determina la altura del sonido.
Aunque existen instrumentos dentro de la familia que están fabricados de metal, la característica principal de éstos es su fabricación predominante en madera y, sobre todo, el nacimiento de su sonido:
INSTRUMENTOS CON BISEL
El sonido se produce al soplar directamente en el extremo de la embocadura. La columna y la vibración del aire son las que producen el sonido.
En la orquesta, los únicos instrumentos con bisel son la Flauta Travesera y el Piccolo.
Fabricados inicialmente con madera, la plata fue el material más común que fue empleado, hasta que los solistas y virtuosos contemporáneos, entre los que destacan James Galway, Jean-Pierre Rampal o Emmanuel Pahud, convirtieron a las flautas de oro en símbolos de jerarquía.
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| Emmanuel Pahud, Filarmónica de Berlín |
Numerosos compositores han creado obras para la flauta desde el siglo XVII. Johann Quantz (1696-1773) compuso más de 500 piezas para el instrumento. La Suite en Si menor para flauta y cuerdas de J. S. Bach, además de las obras de Handel, Haydn y el Concierto para Flauta en Sol Mayor de Mozart, son de las contribuciones más hermosas. Beethoven, Mendelssohn y Tchaikovsky incluyeron en sus obras pasajes muy importantes para la flauta; y los compositores franceses impresionistas como Debussy y Ravel incorporaron sus tonos fríos para teñir sus composiciones. La obra de Debussy Prélude à l'après-midi d'un fauna es famosa por su sensual comienzo con un solo para flauta.
Además de producir pasajes serenos y tranquilos, este instrumento recorre la escala y pasa de las notas agudas a las graves con enorme velocidad. Es, literalmente, la "acróbata de la orquesta".
El Piccolo es el miembro con el timbre más agudo de la orquesta. Aunque Haydn y Mozart lo usaron, Beethoven consolidó su posición en la orquesta con algunos fragmentos de sus obras como en la Sinfonía Nº 5. Berlioz lo combinó eficazmente con distintos pasajes en su Symphonie Fantastique. Tchaikovsky aprovechó sus posibilidades en El Cascanueces, y La consagración de la Primavera exige la intervención de dos piccolos.
Además de producir pasajes serenos y tranquilos, este instrumento recorre la escala y pasa de las notas agudas a las graves con enorme velocidad. Es, literalmente, la "acróbata de la orquesta".
El Piccolo es el miembro con el timbre más agudo de la orquesta. Aunque Haydn y Mozart lo usaron, Beethoven consolidó su posición en la orquesta con algunos fragmentos de sus obras como en la Sinfonía Nº 5. Berlioz lo combinó eficazmente con distintos pasajes en su Symphonie Fantastique. Tchaikovsky aprovechó sus posibilidades en El Cascanueces, y La consagración de la Primavera exige la intervención de dos piccolos.
INSTRUMENTOS DE LENGÜETA DOBLE
Estos instrumentos se caracterizan por tener un tubo cónico o cilíndrico de madera al que se le han ido incorporando llaves a lo largo del tiempo. Esta caña o doble lengüeta, se sitúa al principio del instrumento. La producción del sonido comienza en la vibración de las cañas entre sí, atadas en el extremo contrario y unidas en un tubo o tudel.
Los instrumentos de lengüeta doble son el Oboe, el Corno Inglés, el Fagot y el Contrafagot.
El oboe es el soprano de los instrumentos con lengüeta doble. El nombre proviene de la palabra francesa hautbois, que significa "madera alta". Se fabrica con madera de ébano y su cuerpo tiene forma cónica, es decir, es más ancho en la campana o base. El oboe moderno tiene una antigüedad de trescientos años. Fue creado por Pierre Hotteterre durante la década de 1650 en París. Lully lo usó por primera vez en la orquesta operística de Luis XIV.
A los compositores les ha complacido escribir para el oboe, por su característico timbre. Beethoven lo escogió para el movimiento lento de la Sinfonía Nº 3, donde el oboe despliega todo su carácter dramático con una melodía de lamento y tristeza. Uno de los impulsores de la revolución para el oboe en la música orquestal fue Berlioz, que hablaba de las posibilidades y limitaciones del instrumento en su tratado:
El oboe es el soprano de los instrumentos con lengüeta doble. El nombre proviene de la palabra francesa hautbois, que significa "madera alta". Se fabrica con madera de ébano y su cuerpo tiene forma cónica, es decir, es más ancho en la campana o base. El oboe moderno tiene una antigüedad de trescientos años. Fue creado por Pierre Hotteterre durante la década de 1650 en París. Lully lo usó por primera vez en la orquesta operística de Luis XIV.
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Albrecht Mayer (1965), Filarmónica de Berlín |
"Los pasajes rápidos, cromáticos o diatónicos producen un sonido poco agraciado y casi ridículo efecto. El oboe es un instrumento melódico, de carácter pastoril, lleno de ternura y timidez."
Berlioz compuso algunos de los pasajes orquestales más conocidos comprometidos de la literatura del oboe. El movimiento Scene aux Champs de la Sinfonía Fantástica, el oboe y el corno inglés muestran las cualidades que les son atribuidas en su tratado.
El corno inglés es un oboe contralto. Aunque ahora la forma de su cuerpo es recta, antes de 1839 era curvo.
Se utilizó primero en orquestas operísticas de fines del siglo XVIII. Fue Rossini quien le asignó un papel importante en su obertura de Guillermo Tell. Las primeras manifestaciones del corno inglés son el solo del comienzo del tercer acto de Tristán e Isolda de Wagner, y los extensos pasajes del poema El cisne de Tuonela de Sibelius.
El fagot es el bajo de la familia de los vientos madera. Tiene una longitud de casi dos metros y medio, por lo que presenta forma de "U" para que el instrumentista pueda alcanzar todas las llaves. Suelen llevar una correa alrededor del cuello para sostener el instrumento. Fue inventado alrededor de 1600, relacionándolo como "el payaso de la orquesta". Esta imagen se ve reforzada en El aprendiz de Brujo de Paul Dukas. Tchaikovsky demostró en su Sinfonía Nº 5 que el fagot puede producir una tierna melodía o sentimientos profundos y trágicos como los plasmados en la Sinfonía Nº 6.
El contrafagot es un instrumento enorme, que aunque no se escucha con mucha frecuencia, cobra un importante papel en la Sinfonía Nº 1 de Brahms.
El corno inglés es un oboe contralto. Aunque ahora la forma de su cuerpo es recta, antes de 1839 era curvo.
Se utilizó primero en orquestas operísticas de fines del siglo XVIII. Fue Rossini quien le asignó un papel importante en su obertura de Guillermo Tell. Las primeras manifestaciones del corno inglés son el solo del comienzo del tercer acto de Tristán e Isolda de Wagner, y los extensos pasajes del poema El cisne de Tuonela de Sibelius.
El fagot es el bajo de la familia de los vientos madera. Tiene una longitud de casi dos metros y medio, por lo que presenta forma de "U" para que el instrumentista pueda alcanzar todas las llaves. Suelen llevar una correa alrededor del cuello para sostener el instrumento. Fue inventado alrededor de 1600, relacionándolo como "el payaso de la orquesta". Esta imagen se ve reforzada en El aprendiz de Brujo de Paul Dukas. Tchaikovsky demostró en su Sinfonía Nº 5 que el fagot puede producir una tierna melodía o sentimientos profundos y trágicos como los plasmados en la Sinfonía Nº 6.
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Gustavo Nuñez, Escuela Superior de Música "Robert Schumann", Düsseldorf (Alemania) |
INSTRUMENTOS DE LENGÜETA SIMPLE
Estos instrumentos necesitan una embocadura totalmente intercambiable y configuraba en la que la caña es sujetada mediante una abrazadera. La articulación es más versátil que en la doble caña, ya que los armónico afloran con mayor versatilidad y el control en todo el registro es mucho más dinámico.
Los instrumentos de lengüeta simple de la orquesta sinfónica son el Clarinete y el Saxofón.
El clarinete es un instrumento muy versátil y expresivo que puede murmurar una melodía u originar pasajes llenos de fragmentos acelerados. Tiene una longitud de unos sesenta centímetros, y un tubo bastante angosto con un sistema de llaves que cubren los orificios destinados a determinar el timbre. El extremo de la caña puede vibrar libremente cuando el ejecutante se la coloca entre los labios.
Fue inventado alrededor de 1700 por Johann Christian Denner. Mozart lo utilizó en sus últimas sinfonías y compuso un Concierto para Clarinete y Orquesta, dedicado a Antón Stadler. Los compositores han utilizado y experimentado con el timbre del clarinete. La obra Klezmer dances de Göran Fröst es un claro ejemplo.
Por último, el saxofón es un instrumento de bronce, pero es pertenece a la familia de viento madera a causa de su boquilla, también de una sola lengüeta. Hay cuatro tamaños: el soprano, el contralto, el tenor y el barítono.
Fue inventado en 1846 por Adolphe Sax, clarinetista belga. Bizet lo utilizó en la Suite Nº 1, y Debussy compuso una Rapsodia para Saxofón y Orquesta. Aunque el instrumento no ha encontrado un lugar fijo en la orquesta sinfónica porque tiende a forzar las cuerdas, Richard Strauss lo ha incluido en la Sinfonía Doméstica; Vaughan Williams, en su Sinfonía Nº 6; y es uno de los protagonistas del Bolero de Ravel.
En Estados Unidos se convirtió en pieza fundamental de las bandas de vientos a partir de la década de 1870. De allí, pasó a las bandas de jazz de la década de 1920, donde surgieron virtuosos como Jimmy Dorsey o Charlie Parker.
En definitiva, estos son todos los instrumentos de viento madera de la orquesta sinfónica, que le aportan un timbre característico que, junto a todos los demás, provocan un resultado armonioso.
El clarinete es un instrumento muy versátil y expresivo que puede murmurar una melodía u originar pasajes llenos de fragmentos acelerados. Tiene una longitud de unos sesenta centímetros, y un tubo bastante angosto con un sistema de llaves que cubren los orificios destinados a determinar el timbre. El extremo de la caña puede vibrar libremente cuando el ejecutante se la coloca entre los labios.
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Martin Fröst, Stavanger International Chamber Music Festival |
Por último, el saxofón es un instrumento de bronce, pero es pertenece a la familia de viento madera a causa de su boquilla, también de una sola lengüeta. Hay cuatro tamaños: el soprano, el contralto, el tenor y el barítono.
Fue inventado en 1846 por Adolphe Sax, clarinetista belga. Bizet lo utilizó en la Suite Nº 1, y Debussy compuso una Rapsodia para Saxofón y Orquesta. Aunque el instrumento no ha encontrado un lugar fijo en la orquesta sinfónica porque tiende a forzar las cuerdas, Richard Strauss lo ha incluido en la Sinfonía Doméstica; Vaughan Williams, en su Sinfonía Nº 6; y es uno de los protagonistas del Bolero de Ravel.
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Jukka Perko |
En definitiva, estos son todos los instrumentos de viento madera de la orquesta sinfónica, que le aportan un timbre característico que, junto a todos los demás, provocan un resultado armonioso.
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